La seguridad siempre ha sido uno de los principales problemas a resolver para gobiernos, alcaldías y comunidades; esto se debe a que los desafíos en cuanto a prevención y respuesta se presentan constantemente.
Al aplicar la solución conocida como “Safe City”, los gobiernos, departamentos policiales y demás instituciones responsables de la seguridad comunal, logran mejorar la seguridad en las ciudades y zonas donde se aplica, lo que resulta en una mejor preparación frente a posibles emergencias.
¿Cómo se logra?
La mayoría de las ciudades cuentan con varias instituciones para dar respuesta a todo tipo de emergencia. Por lo general, cada institución tiene un sistema y una base de datos independiente. Esto tiende a dificultar la transmisión de información, lo que resulta en retrasos y una capacidad de respuesta reducida.
Para contrarrestar esta situación, el sistema de la Safe City permite centralizar las operaciones e integrar todas las instituciones, creando una línea de comunicación más directa y eficiente.
Así se crea un centro de control o de convergencia desde el cual se monitorea la ciudad a través de diferentes tipos de cámaras dispuestas estratégicamente en base a la información suministrada por los diferentes organismos de seguridad de la ciudad. Además, como su nombre lo dice, es el punto donde toda información recolectada se une y se transmite de forma directa e inmediata a las autoridades competentes gracias a la integración en un solo sistema.
Por ejemplo, si se recibe una llamada denunciando un crimen, el operador ingresa la información en el sistema, las cámaras confirman el suceso y al mismo tiempo se da aviso a la autoridad competente más cercana.
A esto se le puede sumar el uso de tecnologías como robots para tareas de vigilancia en campo, parlantes para transmitir mensajes de alerta, entre otros.
¿Cuáles son los beneficios de una safe city?
Con la Safe City se obtienen condiciones de seguridad mejoradas y una mayor eficiencia al realizar operaciones. Sin embargo, existen beneficios más específicos, tales como:
- Mejora de las actividades de prevención criminal.
- Reducción en la tasa de actividades criminales.
- Mayor protección para personas y propiedades.
- Mejora en tiempo de respuesta ante una emergencia.
- Aumento de tasa de condenas policiales.
- Mejor percepción ciudadana y turista.
- Aumento de las actividades realizadas al aire libre.
- Aumento en la apreciación gubernamental.
- Aumento en la apreciación policial.
- Mayor prosperidad económica.
- Aumento del turismo.
- Aumento de empleos.
En conclusión, la Safe City es un buen primer paso hacia la Smart City. Al controlar la seguridad, la integración de otras operaciones resultará mucho más fácil.