Entre el 2000 y 2002 la población chilena, específicamente en la Región Metropolitana, presentó mayor temor y sensación de inseguridad que años anteriores, según encuesta de la Fundación Paz Ciudadana.
De acuerdo a estadísticas y denuncias de detenidos del Ministerio del Interior y Carabineros, durante ese periodo hay un incremento de los delitos denunciados y repercusiones en la ciudadanía, reflejado en el crecimiento de la vigilancia privada.
En este contexto, la comuna de Vitacura decide implementar centros de video vigilancia para promover la sensación de seguridad entre sus habitantes. Para ello instaló cámaras análogas en algunos puntos estratégicos.
El problema
Los vecinos de Vitacura agradecieron la iniciativa, sin embargo, con el paso de los años los operadores de estos sistemas de seguridad comenzaron a tener algunos problemas:
- En caso de accidentes en los cuales estaban involucrados autos en los puntos donde existían cámaras, las personas pedían respaldo de las imágenes para detectar patentes u otros detalles relevantes para una investigación, pero era difícil detectarlos por la falta de nitidez.
- Las cámaras que eran dañadas por accidentes, temporales o desperfectos, permanecían varios días sin funcionar a la espera de personal especializado para su reparación, dejando puntos ciegos en la comuna.
- El aumento de la delincuencia obligaba a la comuna a modernizar su sistema de video vigilancia, para que no solo grabara, sino además pudiera analizar imágenes y facilitar la detección de hechos sospechosos.
- El 2007 se inaugura el Parque Bicentenario de Vitacura, espacio dirigido a actividades recreativas y deportivas para las familias, y la explanada del Centro Cívico. Se trataba de un espacio de 15 hectáreas abiertas todo el día y la noche por lo que se requería de mayor seguridad y control.
El desafío
Para evitar problemas de seguridad en los recintos recién inaugurados y dar tranquilidad a la comunidad, era necesario contar con un proveedor de cámaras de seguridad que:
- Aumentara la dotación de cámaras.
- Permitiera sacar mayor provecho a las imágenes.
- Asegurara continuidad operativa de las cámaras de seguridad.
Fue entonces cuando Ingesmart se adjudicó el proyecto para la instalación de cámaras de video vigilancia con tecnología IP, la reparación y mantención preventiva de las cámaras de licitaciones anteriores que ya estaban en funcionamiento.
Esta iniciativa contempla la operación de 50 puntos de cámaras de vigilancia, con imágenes en colores y de alta resolución, con sensibilidad y sensor de imagen, captando en mayor grado de precisión los vehículos, logrando identificar personas y objetos con el máximo de claridad hasta 1.000 metros de distancia, lo cual facilita la individualización instantánea de todo el entorno monitoreado las 24 horas del día.
El resultado
Ingesmart preparó una solución tecnológica a cargo de las necesidades de la comuna, para lo cual instaló cámaras IP para mejorar la calidad de imagen en los puntos recientemente inaugurados y entregar información a nivel de detalle en caso de la detección de algún hecho delictual.
Adicionalmente, la experiencia y conocimiento de la empresa le permitiría realizar adecuadas mantenciones a los equipos y asegurar a los habitantes que el sistema de seguridad operará todo y todos los días del año.
¿Qué beneficios trajo Ingesmart a la Municipalidad de Vitacura?
- 50 puntos de cámaras de vigilancia operativas en toda la comuna.
- Mejor calidad de imagen.
- Continuidad operacional.
- Mantención preventiva de las cámaras.
- Obtención de información clave en caso de choques o atropellos.
- Controles de acceso (se captan a nivel de detalle los rostros de las personas).
- Sistema más amigable y sin dificultades de manejo, ni operación.
- Activación de dispositivos y sensores mediante reglas definidas.
- Inteligencia y análisis de las imágenes.
Una de las cámaras ubicadas en Av. Bicentenario fue clave para identificar al responsable del accidente donde falleció la pequeña Emilia Silva de 9 meses de edad, la que permitió no solo dejar registro del hecho, sino además la patente del vehículo que no hizo ningún intento por frenar o evadir al auto de la familia Silva Figueroa. Incluso se aprecia cómo se da a la fuga pasando por unas bolas de concreto para luego chocar contra un árbol y ser detenido por un transeúnte.
Actualmente, el Parque Bicentenario cuenta con 20 cámaras de vigilancia instaladas en sus 27 mil metros cuadrados de áreas verdes. Con esta medida, al igual que otros parques a nivel mundial (Central Park de Nueva York, Parque Central de Caracas, entre otros) el espacio público es monitoreado las 24 horas del día por la central de operaciones de seguridad mediante nueve pantallas, exclusivas para la seguridad del parque.