Un barrio completo de la ciudad de Coruña, en España, tuvo que ser desalojado la tarde del 18 de febrero del 2012. La razón: una elevada concentración de monóxido de carbono que provocó la intoxicación de varios vecinos y en especial de una pareja, la cual debió ser trasladada de urgencia al Hospital Universitario.
Funcionarios de Protección Civil y del cuerpo de bomberos de la ciudad española, junto con técnicos de Repsol, efectuaron las mediciones y determinaron niveles anormales de gas, razón por la cual, junto a los cuerpos de seguridad, procedieron a evacuar al resto de los inquilinos.
En declaraciones a la prensa local, el jefe de bomberos de Sada explicó que, aunque la primera hipótesis que manejaron era que se trataba de un escape de gas debido a la mala combustión de una caldera, finalmente pudieron comprobar que la alta concentración de monóxido de carbono fue provocada por una fuga de agua que quemó parte del cableado que había al interior de la vivienda, liberando gases tóxicos.
Una buena chaqueta puede salvarle la vida
Sucesos como el ocurrido en Coruña se repiten a diario en el mundo y son una muestra clara de la importancia que tiene la planificación y arquitectura del cableado de corrientes débiles, así como escoger la chaqueta (material de cubrimiento) adecuada para cada tipo de cable y el proveedor más idóneo.
Una costumbre que no ayuda
Los cables de telecomunicaciones o corrientes débiles UTP usan generalmente una cubierta gris construida con PVC (Policloruro de vinilo). El PVC resiste relativamente bien las altas temperaturas, es un buen aislante eléctrico, es flexible pero, sobre todo, económico.
Sin embargo, este tipo de chaqueta o cubierta de PVC tiene un punto muy negativo en su contra: contienen en su composición halógenos que al quemarse pueden ser altamente contaminantes y tóxicos porque emiten dioxinas que, suspendidas en el humo, pueden desplazarse a gran distancia, contaminar el agua y hasta filtrarse en la tierra, lo que en definitiva demuestra que el PVC es un material potencialmente peligroso por su toxicidad.
En Chile no existe una norma que rija la instalación y condiciones para la arquitectura del cableado de corrientes débiles. Sin embargo, la norma de electricidad en Chile estipula los requerimientos que deben cumplir las instalaciones eléctricas y establece ubicaciones determinadas donde el cableado debe tener cubierta o chaqueta LSZH (Low Smoke – Zero Halogen) que en el caso de un incendio libera baja cantidad de humo no tóxico, esencialmente libre de halógenos. Esto se puede conseguir gracias al polipropileno (PP), un plástico con bastante mejor fama que el PVC. Cabe destacar que la experiencia y las estadísticas han demostrado que cuando se produce un incendio en un edificio, la mayoría de las víctimas fatales muere a causa de la intoxicación por el humo y no por quemaduras.
No es extraño entonces que muchos proyectos de cableado estructurado condicionen y exijan, más allá de una categoría específica de cable, que la cubierta sea LSZH.
Si bien es cierto que un cable UTP de CAT-6 con cubierta LSZH puede ser considerablemente más caro que otro de la misma categoría con cubierta en PVC, la colocación adecuada de la chaqueta en el lugar correcto puede ahorrarle muchos dolores de cabeza y hasta salvarle la vida.
No deje el cableado de su oficina a la improvisación, planifique su arquitectura, asesórese sobre cuáles son las mejores opciones para usted.